Más agentes para controlar que se cumplen las normas en las Fallas

Valencia

El último dato de incidencia acumulada, el conocido ayer, es de 197 casos de coronavirus por cada cien mil habitantes. Hace un mes, el 30 de julio era casi tres veces más, 575. A estas alturas, después de tantas olas, todos sabemos lo fácil y rápido que es subir... y lo que cuesta bajar. Porque a pesar de ese descenso, conseguido además en plena campaña turística, seguimos en riesgo alto.

Con este panorama afrontamos desde mañana la celebración de las fallas en València y más municipios de la Comunitat Valenciana. Y por eso, el mensaje hoy es claro: por un lado reforzar controles para evitar que la cosa se desmadre, y por otro, lo más básico y lo más difícil de conseguir: que la responsabilidad individual y colectiva, haga el resto.

De ahí que esta mañana se haya celebrado la última reunión en el Palau de la Generalitat entre la delegación del gobierno, las consellerias de interior y sanidad y los municipios que a partir de mañana celebran estas fallas atípicas. El dispositivo está cerrado ya: más policía local, nacional y autonómica, más guardia civil, todo ello para controlar el cumplimiento de las normas y las restricciones.

Y esto es especialmente complejo, como explica la consellera de Justicia e Interior, Gabriela Bravo, porque no solo hay que controlar actos oficiales como mascletàs, castillos u ofrendas... sino que hay que vigilar también que se cumplen las normas, por ejemplo, en las carpas de cada una de las comisiones.

Por eso se refuerza el dispositivo, por eso, y porque preocupa mucho la proliferación de fenómenos como el botellón, y Bravo pide a los ayuntamientos que actúen de forma preventiva, para evitar acumulaciones de gente, sin control, y fuera del horario establecido, que son verdaderos focos de contagio.

Y es que como confirma la consellera de Sanidad, Ana Barceló, esa variante Delta constituye ya el 95 por ciento por ciento de los casos... Así que un mayor contacto social y la relajación en el cumplimiento de las medidas puede dar al traste con el descenso paulatino de la incidencia.

Así que Barceló vuelve a apelar a la responsabilidad individual y colectiva, porque aunque estemos vacunados con pauta completa, el virus aprovecha cualquier descuido para continuar propagándose.